Si eres estudiante, como la mayoría de los usuarios que nos leen cada día, entonces probablemente tengas ya muchísimo material que leer semanalmente. Esto no sería un gran problema si la lectura no tuviera muchísimo material sin sentido, que en realidad no necesitas porque en definitiva no te evaluarán sobre ella.
Pero la realidad es bien otra: tienes mucho por leer, y además, tienes que recordar lo que lees, especialmente cuando se acerca el examen. De manera que, a no ser que escojas lo más importante, terminarás por perder el tiempo. Un tiempo muy valioso que podrías dedicar, por ejemplo, a reforzar la información y el material verdaderamente útil.
¿Qué es un resumen? ¿En qué consiste?
El resumen es esencial en el proceso de estudio de cualquier material. Y, además, no solo es necesario en el proceso de estudio. En definitiva, es útil en cualquier otro momento, ya sea para el estudio o para el trabajo, al ayudarte a trabajar únicamente con lo esencial, con lo fundamental y, sobre todo, con lo importante.
Podríamos definirlo como la redacción de un texto nuevo a partir de otro texto, pero exponiendo solo las ideas principales o más importantes del texto original, que se caracteriza habitualmente por ser más extenso y complejo.
Básicamente consiste en un texto de extensión variable que tiende a lo breve. En él se sintetizan y se abrevian las ideas de un texto, que destacan precisamente por ser las más importantes, habitualmente de mayor complejidad.
Es, en definitiva, una forma condensada de un texto más complejo y largo, lo que significa que para su elaboración se debe anteriormente seleccionar el material, vital e importante, y descartar todo aquello del texto que sea superfluo, suplementario o decorativo.
Por tanto, el objetivo fundamental que se busca es el que brindar una muestra clara del contenido de un determinado libro o texto más largo y complejo, haciéndolo además de manera sintetizada, escogiendo para ello únicamente las ideas centrales y más importantes del mismo.
¿Cuántos tipos de resúmenes existen?
Dependiendo de la finalidad y el tipo de resumen existen ciertas diferencias que se basan claramente en función de lo que se desee transmitir con el mismo, y cuál es el objetivo fundamental que buscamos con su elaboración. Podemos diferenciar entre:
- Resumen informativo: Es uno de los más comunes y habituales. Trata de sintetizar el contenido del texto original, siendo tremendamente útil a la hora de brindarnos una información rápida y general del mismo.
- Resumen descriptivo: Suele complementar al anterior, y ayuda a explicar -y conocer- la estructura del escrito o texto a resumir, teniendo en cuenta cuáles son sus partes fundamentales. Es especialmente útil en textos extensos y/o muy complejos.
- Síntesis: Consiste en resumir diferentes textos que tratan sobre un mismo tema o sobre una serie de temas diversos que, sin embargo, se encuentran relacionados entre sí. Es una técnica de reducción ideal para resumir aquellos elementos esenciales de muchos textos, y así obtener un resumen más coherente.
¿Para qué sirve el resumen y qué beneficios nos ofrece?
- Te asegura que estás produciendo contenido importante. La clave para cualquier sesión de estudio exitosa es la de producir contenido que, luego, puedes utilizar para seguir estudiando. Así, en realidad no has estudiado nada si durante el proceso no has producido notas, tarjetas o gráficos. Cuando resumes lo que lees participas de forma activa en el material que estás leyendo. Si bien es cierto que subrayar y resaltar aquellas palabras o párrafos es un método útil y muy popular, no es muy exitoso si no se acompaña del correspondiente resumen. ¿Por qué? Muy simple: resumir te ayudará a estar seguro de que tu tiempo de estudio ha sido más productiva y exitosa.
- Te ayuda a encontrar los puntos principales (y los detalles clave). Un buen resumen es ideal para buscar y encontrar los puntos principales, las ideas más importantes y los detalles clave de cada párrafo. En este punto destaca lo que los especialistas conocen como «aprendizaje efectivo», que consiste en tratar de identificar y comprender los puntos principales y los detalles más importantes o clave. Por tanto, a la hora de resumir puede ser útil la siguiente máxima: para cada sección o capítulo escribir 2 o 3 líneas que tengan relación con lo que dice el autor.
- Ahorra tiempo. Si el resumen está bien hecho y solo se ha escogido lo verdaderamente importante, no hay duda que te ayudará a ahorrar muchísimo tiempo.
Como vemos, elaborar un resumen puede ser sencillo si tienes las herramientas adecuadas para aprender a hacerlo. La clave, como en todo, está en la práctica.